Autores

 

Kresley Cole: Tiene un doctorado en Lengua Inglesa por la Universidad de Florida y es autora de la trilogía de «Los hermanos Sutherland», «Los hermanos MacCarrick» y de la serie «Los Inmortales de la Oscuridad». 

Ha sido galardonada con los premios más prestigiosos del género, como el RITA por la mejor novela romántica paranormal, los de la crítica de Romantic Times y Scribes World o el Barclay Gold, entre otros.

Anna Casanovas: Nació en Calella, un pueblo de la provincia de Barcelona, y es la mayor de una familia de seis hermanos que son su mayor fuente de inspiración. Tras estudiar la carrera de Derecho empezó a trabajar en una entidad financiera sin renunciar a dos de sus grandes pasiones: leer y escribir. Como ella siempre ha creído que las novelas románticas son el mejor invento desde el chocolate, Keanu Reeves o los besos de su marido decidió arriesgarse a escribir una propia: Nadie como tú.

 
 
 
Charles perrault:  fue un escritor francés, principalmente reconocido por haber dado forma literaria a cuentos clásicos infantiles tales como Caperucita Roja y El gato con botas, atemperando en muchos casos la crudeza de las versiones orales.
Nació el 12 de enero de 1628 en la ciudad de París, mediante un parto doble, en el que también vino al mundo su gemelo François. Su familia perteneciente a la burguesía acomodada, hizo posible que tuviera una buena infancia y concurriera a las mejores escuelas de la época. Ingresó en el colegio de Beauvais en 1637, donde descubre su facilidad para las lenguas muertas. A partir de 1643, comienza a estudiar derecho. Indudablemente hábil y con un notorio sentido práctico, recibe la protección de su hermano mayor Pierre quien es Recaudador General. En 1654 es nombrado funcionario para trabajar en el servicio gubernamental. Tomó parte en la creación de la Academia de las Ciencias y en la restauración de la Academia de Pintura. Jamás luchó contra el sistema, lo cual le facilitó la supervivencia en una Francia muy convulsionada políticamente y en la que los favoritos caían con demasiada frecuencia Su vida siempre dedicada al estudio, dejaba escaso margen a la fantasía.
 
 
 
Hans Christian Andersen: fue un escritor y poeta danés, famoso por sus cuentos para niños, entre ellos El patito feo o La sirenita.                                           
 Nació el 2 de abril de 1805 en OdenseDinamarca. Su familia era tan pobre que en ocasiones tuvo que dormir bajo un puente y mendigar. Era hijo de un zapatero de 22 años, instruido pero enfermizo, y de una lavandera de confesión protestante. Andersen dedicó a su madre el cuento La pequeña cerillera, por su extrema pobreza, así como No sirve para nada, en razón de su alcoholismo.
Desde muy temprana edad Hans Christian mostró una gran imaginación que fue alentada por la indulgencia de sus padres. En 1816 murió su padre y Andersen dejó de asistir a la escuela; se dedicó a leer todas las obras que podía conseguir, entre ellas las de Ludwig Holberg y William Shakespeare.
 
  
 

Antonio Machado: Nació el 26 de julio de 1875 en Sevilla. Fue el segundo de cinco hermanos de una familia liberal; el mayor de ellos, Manuel, trabajó junto a Antonio en varias obras. Su padre, Antonio Machado Álvarez «Demófilo», amigo de Joaquín Costa y de Francisco Giner de los Ríos, publicó numerosos estudios sobre el folclore andaluz y gallego. Su abuelo, Antonio Machado Núñez, era médico y profesor de Ciencias Naturales.

En 1883, su abuelo fue nombrado profesor de la Universidad Central de Madrid y toda la familia se traslada con él a dicha ciudad. Antonio Machado completa entonces su formación en la célebre Institución Libre de Enseñanza, fundada por Francisco Giner de los Ríos.

En 1889 empezó sus estudios de bachillerato, primero en el instituto San Isidro y después en Cardenal Cisneros. Es en esa época cuando se aficionó al teatro junto a su hermano, y comenzó a asistir a tertulias. Machado interrumpió varias veces sus estudios, afectado por los problemas económicos de su familia tras la muerte de su padre por tuberculosis en 1893 y su abuelo, tres años más tarde. El influjo familiar y su centro de estudios marcaron su camino intelectual. Por aquella época, conoció a Valle-Inclán en una tertulia. Trabajó en la parte de los verbos, en el Diccionario de ideas afines.